La acción de gracias - La hora que cambia al mundo

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LA ACCIÓN DE GRACIAS: 

un acto de reconocimiento

Aunque íntimamente relacionada con la alabanza, la acción de gracias es en sí misma un elemento importante que merece una cuidadosa atención durante la oración. Básicamente, la acción de gracias es el acto de expresar nuestra gratitud a Dios por las bendiciones específicas que nos ha otorgado. Estas expresiones pueden" ser mentales o vocales.  

· 11 La acción de gracias difiere de la alabanza en que esta última se centra en lo que es Dios, en tanto que la acción de gracias se centra en lo que Dios ha hecho específicamente a favor de nosotros. Un escritor explica: "Cuando damos gracias, le damos gloria a Dios por lo que ha hecho a nuestro favor; y cuando adoramos o alabamos, le damos gloria a Dios por lo que Él es en Sí mismo."  

La actitud en la acción de gracias 

La posición exacta para la acción de gracias en nuestro programa de oración puede variar. Yo he decidido colocarla hacia el fin de mi hora de oración, como un acto de reconocimiento a Dios, después de hacer las peticiones. La acción de gracias me ayuda a concentrarme en la fidelidad de Dios. 

Sin embargo, una simple mirada a las Escrituras parece sugerimos que la acción de gracias se pudiera esparcir por toda nuestra oración. Pablo les dijo a los colosenses: "Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias" (Colosenses 2:6, 7). Posteriormente añadió: "Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias" (Colosenses 4:2). 

Pablo dio un mensaje similar a la iglesia de Filipos. Él les indicó a estos creyentes: "Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias" (Filipenses 4:6). Según Pablo, todas las oraciones deben estar plenas de un "espíritu de acción de gracias". 

La confesión de las bendiciones 

La acción de gracias pudiera llamarse "la confesión de las bendiciones". Durante este aspecto de la oración reconocemos todas las bendiciones de la vida y las confesamos delante de Dios. Esto es esencial para la oración, porque acerca el corazón a Dios, y nos mantiene enteramente centrados en El. Como ocurre con la alabanza, la acción de gracias aparta la atención del creyente de sí mismo y la lleva adonde debe estar centrada para que la oración sea eficaz. 

La acción de gracias también es importante porque es el obsequio especial que el guerrero de la oración le da a Dios por su bondad. ¿Qué otra cosa pudiéramos dar a Dios que no sea la alabanza y la acción de gracias? El salmista declaró: "¿Qué pagaré a Jehová por todos sus beneficios para conmigo?" (Salmo 116:12). Más adelante, él responde: "Te ofreceré sacrificio de alabanza, e invocaré el nombre de jehová" (Salmo 116:17).  

Al observar la vida de Cristo, se hace evidente, que el espíritu de acción de gracias era importante para Él. En los Evangelios, vemos que frecuentemente el Señor expresa gratitud. Al describir la resurrección de Lázaro, el apóstol Juan registra: "Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a los alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído” (Juan 11:41) En otra ocasión, luego de impartir enseñanzas importantes a sus discípulos, Jesús hizo una pausa para orar: "Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños" (Mateo 11:25)). Ciertamente aquello que era tan importante para nuestro Salvador, debe considerarse esencial en nuestra oración habitual. 

Ofrendas de acción de gracias  

Una mente acostumbrada a divagar, normalmente impide la oración eficaz, pero si se la canaliza adecuadamente, en realidad puede resultar útil durante el tiempo de acción de gracias. Permita usted que su mente divague a través de las actividades del día anterior. Esto lo llevará a muchos puntos de concentración para la acción de gracias específica. 

Además, esté atento a todo lo que está alrededor de usted. ¿Qué ve usted que sea digno de acción de gracias? En el mismo sentido en que necesitamos "velar" en oración, o estar alerta con respecto a ciertas necesidades, necesitamos "velar" en cuanto a la acción de gracias. Esté usted más consciente de aquellas cosas específicas que Jesús ha hecho a favor de usted. Luego exprese verbalmente esas bendiciones. 

Recuerde que la acción de gracias comienza · cuando usted clasifica mentalmente las cosas específicas que Dios ha hecho por usted, de tal modo que pueda expresar con palabras esas bendiciones. 

A continuación presento una breve lista de varias "ofrendas de acción de gracias" que usted pudiera dar a Dios durante su hora de oración: Primeramente, confiese las bendiciones espirituales. ¿Qué bendiciones espirituales específicas le ha dado Dios recientemente? Tal vez Él le ha otorgado una bendición especial durante la misma hora de oración, que es digna de unas palabras de reconocimiento. Separe tiempo durante la oración para devolverle esas bendiciones a Dios bajo la forma de una ofrenda de acción de gracias expresada verbalmente. 

Luego, confiese las bendiciones materiales. Debe dedicarse un momento para considerar las muchas bendiciones materiales que Dios ha provisto generosamente. Sea usted muy específico: recuerde aun las cosas pequeñas. Dele gracias por la silla en que se sienta, o por el cuarto en que está. Cuanto más específica se vuelva la acción de gracias, tanto más significativo será el papel que jugará en su vida de oración. 

En tercer lugar, confiese las bendiciones físicas. Debemos dar gracias a Dios específicamente por la buena salud. Si estamos libres de dolores o enfermedades, ésa es una bendición digna de acción de gracias. Si sentimos dolor en una pierna, podemos expresar gratitud por la fortaleza que tenemos en la otra. Podemos dar gracias a Dios por la buena visión, o por la capacidad de oír. Cada latido del corazón o cada respiración puede ser motivo de acción de gracias. Como sucede con la alabanza, la acción de gracias es verdaderamente ilimitada. 

Finalmente, confiese las bendiciones externas. Algunas bendiciones no se relacionan directamente con nosotros, pero aun así merecen una expresión de gratitud. Estas se pudieran llamar bendiciones externas. Por ejemplo, dé gracias a Dios por las bondades otorgadas a sus amigos, a la comunidad, o la. nación. Sobre todo, darle gracias por las bendiciones que derrama sobre la obra de evangelización en todo el mundo. 

Pero esfuércese de modo especial por escapar de la tendencia de generalizar la acción de gracias. En vez de declarar: "Dios, te doy gracias por haber bendecido nuestro culto de adoración el domingo pasado"; puntualice su acción de gracias. Que incluya razones específicas por las cuales usted está agradecido. 

Gratitud por las bendiciones pasadas 

Una meta especialmente significativa es la de dar gracias a Dios cada día, a lo menos por una bendición que usted no puede recontar haberle dado gracias antes. Esto exige un momento de callada contemplación con respecto a la bondad de Dios. 

Al buscar un punto de enfoque para este tipo de acción de gracias, tal vez usted quiera echar una mirada a sus experiencias pasadas. Tal vez Dios le concedió algún favor específico o alguna bendición particular hace décadas, por lo cual usted nunca le expresó gratitud. ¿Recuerda usted si alguna vez dio gracias a Dios específicamente por la persona que por primera vez le habló de Jesús? ¿Le ha dado gracias a Dios por la primera Biblia, o por los maestros de escuela dominical que lo animaron en los primeros años de su fe? 

Pablo, en su admonición a los creyentes efesios, describe además la acción de gracias como ilimitada: "... sed llenos del Espíritu, ... dando siempre gracias por todo al Dios y Padre" (Efesios 5:18, 20). A los tesalonicenses, Pablo añade lo que sigue: "Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús" (1 Tesalonicenses 5:18). Juan Wesley escribió en su diario que, por causa de esta actitud, él pudo dar gracias a Dios por el hecho de que en un accidente sólo se había fracturado el brazo, y no la cabeza. 

En cada situación de la vida, sin importar la dificultad que presente, se puede descubrir el motivo para la acción de gracias. Aun la muerte de un ser amado nos recuerda el conocimiento de la vida · eterna, algo por lo cual estamos verdaderamente agradecidos. 

Busquemos detenidamente desarrollar este ministerio que consiste en expresar nuestra gratitud a Dios durante la oración. Por cada petición especifica podemos . ofrecer dos o tres expresiones de acción de gracias. Permita Dios que· nunca dejemos de estar agradecidos por sus abundantes provisiones ... 

Señor, ¡enséñame a dar gracias! 

La acción de gracias: octavo paso en la oración que cambia al mundo 

1. Comience usted la acción de gracias pensando en todo lo Dios le ha dado en días recientes. 

2. Use estos momentos de reflexión como base para dar gracias por las bendiciones espirituales, materiales, físicas y externas. 

3. Con frecuencia dé usted gracias a Dios por adelantado, por las bendiciones que usted espera que Él le conceda en el futuro. 

4. Dé gracias a Dios a lo menos por una bendición particular por la cual nunca antes le ha dado gracias. 

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